Tras la crisis del mercado hipotecario Americano y las inyecciones de dinero de los bancos centrales para combatir la falta de liquidez, la mayoría nos preguntamos si se avecina una crisis que nos afecte directamente a nosotros.
Yo creo que sí, aunque es posible que aún tarde un año en llegar. Creo que afectará tanto a la bolsa como a la economía familiar.
Por un lado, la bolsa ha estado creciendo mucho durante los últimos años, y esta tendencia en algún momento se dará la vuelta. Este año estamos teniendo demasiados sobresaltos y se está perdiendo la confianza en la bolsa. Hay suficientes argumentos económicos para justificar el cambio de tendencia, luego es cuestión de tiempo que el ciclo alcista de la vuelta y se convierta en uno bajista, aunque espero que esto no haya ocurrido ya.
Por otro lado, creo que en España la economía (la que nos toca de cerca) se va a ralentizar. Para afirmar esto no me baso en datos económicos (que ya vendrán en los próximos meses), sino en la observación. Este año, aunque nos quieran hacer creer lo contrario, los restaurantes, los chiringuitos de la playa, las hamacas, etc han estado mucho más vacíos que otros años. Esto es el resultado de que las familias no tienen para gastar. El problema es que si no consumimos, entonces, las empresas han de producir menos, por lo que requieren menos material, menos personal… Esto se agravará cuando el Banco Central Europeo vuelva a subir los tipos de interés.
Espero equivocarme, pero me temo que de aquí a un par de años, nos vamos a tener que apretar todos el cinturón.